Resumen de la Corteza Terrestre

La corteza terrestre es la capa más externa de nuestro planeta y desempeña un papel fundamental en el sustento de la vida tal como la conocemos. Esta capa de la Tierra está compuesta principalmente por rocas de diferentes tipos y espesor variable. A continuación, te explicaremos en detalle qué es la corteza terrestre y cuáles son sus características principales.

resumen de la corteza terrestre - Qué es la corteza terrestre y cómo se forma

Índice
  1. ¿Qué es la corteza terrestre y cuál es su función?
    1. Corteza oceánica: definición y características
    2. Corteza continental: definición y características

¿Qué es la corteza terrestre y cuál es su función?

La corteza terrestre es una capa de revestimiento que envuelve toda la superficie del planeta. Su principal función es proporcionar una base sólida sobre la cual se asientan los continentes, los océanos, los bosques y los desiertos. Sin la corteza terrestre, no sería posible caminar ni que la vegetación creciera, ya que no habría un sustrato que lo soportara.

La estructura de la Tierra está formada por cuatro capas concéntricas: el núcleo interno, el núcleo externo, el manto y la corteza. La corteza terrestre es la capa más externa y se encuentra sobre el resto de las capas. Está compuesta principalmente por rocas de diferentes naturalezas, como rocas ígneas, metamórficas y sedimentarias.

El espesor de la corteza terrestre varía según la ubicación. En las zonas marítimas, su espesor es de aproximadamente 5 km, mientras que en las zonas montañosas puede alcanzar hasta 70 km de profundidad. Además, la corteza terrestre no es uniforme, sino que está dividida en partes llamadas placas, las cuales se desplazan lentamente sobre las capas internas de la Tierra.

Estos movimientos de las placas tectónicas pueden generar terremotos y erupciones volcánicas cuando chocan o se separan. Es importante destacar que existen dos tipos de corteza terrestre: la corteza oceánica, que cubre la parte del planeta donde se encuentran los océanos, y la corteza continental, que cubre el resto de la superficie terrestre.

Corteza oceánica: definición y características

La corteza oceánica ocupa aproximadamente el 60% de la superficie de la Tierra. Está compuesta principalmente por rocas volcánicas como el basalto y el gabro, y su espesor oscila entre los 5 y 10 km. A diferencia de lo que se creía anteriormente, la corteza oceánica también presenta relieves y accidentes geográficos, como montañas submarinas y volcanes.

Las placas oceánicas son más jóvenes que las placas continentales debido a un proceso de renovación constante. Este proceso implica que las placas pueden separarse y permitir que el material fundido del interior de la Tierra ascienda y se deposite en las capas más antiguas. También pueden superponerse, lo que provoca el hundimiento de los materiales más antiguos.

Corteza continental: definición y características

La corteza continental ocupa el 40% de la superficie de la Tierra y está compuesta por rocas de diferentes orígenes, como el granito y las rocas metamórficas. Su espesor varía entre los 30 km en las llanuras y los 70 km en las montañas más altas. La corteza continental presenta una gran variedad de relieves y accidentes geográficos, los cuales son el resultado del movimiento de las placas tectónicas.

Existen áreas de la corteza continental que son muy antiguas y estables, conocidas como cratones. Estas áreas se encuentran en el interior de los continentes y se dividen en escudos y plataformas, dependiendo de si afloran sobre la superficie o están enterradas bajo sedimentos. Los cratones son las partes más antiguas de la corteza terrestre y no han experimentado fragmentación o deformación en mucho tiempo.

La corteza terrestre es una capa fundamental para el desarrollo de la vida en nuestro planeta. Tanto la corteza oceánica como la continental son importantes para sostener los continentes, los océanos y la diversidad de relieves y accidentes geográficos que existen en la Tierra. Comprender la estructura y las características de la corteza terrestre nos ayuda a comprender mejor nuestro entorno y cómo interactuamos con él.

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