La Ley Nacional 2061 de Protección Integral de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, sancionada en Argentina en el año 2005, tiene como objetivo principal garantizar y proteger los derechos de los niños, niñas y adolescentes, reconociéndolos como sujetos plenos de derechos y estableciendo el concepto de interés superior del niño como la toma de decisiones en su beneficio.
Objeto de la Ley 26061
La ley 26061 tiene como objeto principal la promoción, protección y restitución de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, estableciendo un marco jurídico que garantice su desarrollo integral y su participación activa en la sociedad. Se basa en los principios y normas establecidos en la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), tratado internacional ratificado por Argentina en 1990.
La CDN reconoce a los niños, niñas y adolescentes como sujetos de derechos, con derechos y responsabilidades propios de su edad y madurez. Esta concepción se refleja en la ley 26061, que establece que los niños y adolescentes tienen los mismos derechos que los adultos, así como derechos específicos que se derivan de su condición de personas en desarrollo.
La ley 26061 también establece que todas las decisiones que afecten a los niños, niñas y adolescentes deben ser tomadas en su interés superior, es decir, teniendo en cuenta su bienestar y desarrollo integral. Este principio se basa en la idea de que los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a ser oídos y que sus opiniones deben ser tenidas en cuenta de acuerdo a su edad y grado de madurez.
Definición del Interés Superior del Niño
La ley 26061 define el interés superior del niño como la máxima satisfacción integral y simultánea de los derechos y garantías reconocidos en la constitución nacional, los tratados internacionales de derechos humanos y las leyes. Esto significa que, al tomar decisiones que afecten a los niños, niñas y adolescentes, se debe buscar la máxima protección y promoción de sus derechos, teniendo en cuenta su bienestar físico, mental, emocional y social.
El interés superior del niño implica que todas las decisiones que se tomen en relación a los niños y adolescentes deben ser guiadas por este principio, incluso cuando existan conflictos de intereses entre diferentes actores. Además, se reconoce que el interés superior del niño puede variar según las circunstancias individuales y el contexto en el que se encuentre cada niño o adolescente.
La ley 26061 establece que el interés superior del niño debe ser considerado en todas las instancias en las que se tomen decisiones que afecten a los niños, niñas y adolescentes, ya sea en el ámbito familiar, educativo, de salud, judicial, administrativo o legislativo. Además, se reconoce que los niños y adolescentes tienen derecho a participar en las decisiones que les conciernen, de acuerdo a su edad y grado de madurez.
Referencias Normativas
- Convención sobre los Derechos del Niño (ONU, 1989)
- Ley 284Convención sobre los Derechos del Niño
- Ley 217Convención Interamericana sobre tráfico internacional de menores
- Ley 276Protocolo relativo a la venta de niños, la prostitución infantil y la utilización de los niños en la pornografía
- Ley 206Ley de protección integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes
- Decreto 415/200Reglamentación de la ley 2061
- Ley 114 CABA. Protección integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes
La Ley 26061 de Protección Integral de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes establece el concepto de interés superior del niño como la toma de decisiones que afecten a los niños y adolescentes. Este principio busca garantizar la máxima protección y promoción de sus derechos, teniendo en cuenta su bienestar y desarrollo integral. Es fundamental que tanto el Estado como la sociedad en su conjunto trabajen en conjunto para asegurar el respeto y cumplimiento de estos derechos, reconociendo a los niños y adolescentes como sujetos plenos de derechos y promoviendo su participación activa en la sociedad.