El libro quién se anima a bajar al sótano narra los terribles crímenes cometidos por Josef Fritzl, un ingeniero austríaco que mantuvo a su hija Elisabeth y a sus siete hijos/nietos encerrados en un sótano durante 24 años. Los delitos comenzaron cuando Elisabeth tenía tan solo once años, y se prolongaron a lo largo de todo el cautiverio.
Descubrimiento del caso
El caso salió a la luz cuando Josef llevó a su hija-nieta de 19 años Kerstin al hospital de Amstetten, donde los médicos se dieron cuenta de que no tenía ninguna documentación oficial. Tras ser interrogada por los doctores, Elisabeth reveló la verdad sobre su cautiverio y los abusos que había sufrido durante todos esos años.
Antecedentes
Josef Fritzl, quien había sido abandonado por su padre y criado por una madre abusiva, comenzó a abusar de su hija Elisabeth en 197En 1984, la encerró en un zulo sin ventanas en el ático de su casa, donde la mantuvo cautiva durante 24 años.
Durante ese tiempo, Elisabeth dio a luz a siete hijos, dos de los cuales murieron. Josef confesó haber incinerado el cuerpo de uno de los bebés. Los demás hijos fueron entregados a los padres de Elisabeth, quienes creían que su hija había desaparecido voluntariamente.
Repercusión mediática
El caso Fritzl tuvo un gran impacto mediático desde el primer momento, siendo conocido como el monstruo de amstetten. Incluso se han escrito canciones y películas basadas en este terrible suceso.
Tratamiento de los menores
Los hijos de Elisabeth fueron trasladados a una clínica donde reciben tratamiento psicológico para intentar superar los traumas causados por su cautiverio. Se han realizado diversas actividades terapéuticas para ayudar a su recuperación.
El juicio
Josef Fritzl fue juzgado y condenado a cadena perpetua e internamiento psiquiátrico por los cargos de incesto, violación y secuestro. Aunque inicialmente había negado algunos de los cargos, finalmente admitió su culpabilidad en el juicio.
El libro quién se anima a bajar al sótano relata la historia espeluznante de Josef Fritzl y los terribles crímenes que cometió contra su propia hija y sus nietos. Este caso ha conmocionado al entorno entero y ha dejado una huella imborrable en la historia de Austria.