En la sociedad actual, es común encontrarse con personas que pueden afectar nuestro bienestar emocional y mental. Estas personas, conocidas como personas tóxicas, tienen comportamientos y actitudes perjudiciales tanto para sí mismas como para quienes las rodean. En este artículo, basado en el libro gente tóxica de Bernardo Stamateas, te explicaremos qué es la gente tóxica, cómo identificarla y cómo enfrentarla de manera saludable.
¿Qué es una persona tóxica?
Una persona tóxica es aquella que afecta profundamente nuestro estado de ánimo y cuyo comportamiento puede ser perjudicial para nuestra salud emocional. Estas personas suelen tener rasgos de inseguridad, egoísmo y dependencia emocional. Además, tienden a relacionarse de manera absorbente, agotando, estresando o deprimiendo a quienes están a su alrededor.
Es importante destacar que no todas las personas reaccionan de la misma manera ante las personas tóxicas. La cercanía y el tipo de relación también pueden influir en el grado de toxicidad. Por ejemplo, las relaciones tóxicas con padres o parejas suelen ser más difíciles de gestionar debido al alto grado de vinculación. Sin embargo, también pueden existir relaciones tóxicas con amigos o compañeros de trabajo.
Es fundamental recordar que todas las personas pueden tener comportamientos perjudiciales en determinadas situaciones, pero eso no significa que sean tóxicas en sí mismas. La toxicidad está relacionada con el comportamiento o la relación específica que se establece con otra persona.
Características de las personas tóxicas
Identificar a las personas tóxicas puede no ser fácil, pero existen algunas señales o rasgos característicos que pueden ayudarnos a reconocerlas. Algunas de estas características son:
- Quejicas, negativas y victimistas: Siempre se quejan y ven el lado negativo de las cosas. Además, tienden a culpar a los demás por sus problemas.
- Envidiosas: No soportan los éxitos de los demás y constantemente se comparan con ellos.
- Narcisistas: Creen que todo lo que hacen está bien y se consideran superiores a los demás.
- Orgullosas: No aceptan que les contradigan y tienden a descalificar y menospreciar a los demás.
- Controladoras y dictadoras: Imponen las normas de la relación y no se responsabilizan de sus propios actos.
- Manipuladoras: Engañan y utilizan a las personas para conseguir sus propósitos.
- Agresivas verbalmente: Intentan humillar y dañar la autoestima de los demás a través de palabras hirientes.
- Críticas constantes: Siempre encuentran algo negativo que decir y no valoran las cualidades de los demás.
- Recurren al chantaje y al miedo: Utilizan el miedo y el chantaje emocional para controlar a los demás.
- Propagan rumores: Difunden información falsa o exagerada sobre los demás para dañar su reputación.
- Les gusta dramatizar: Exageran situaciones y crean conflictos innecesarios.
Identificar a una persona tóxica para ti
Para poder convivir y enfrentar situaciones con personas tóxicas, es importante analizar nuestras propias emociones y comprender por qué nos afectan o nos hacen sentir mal. Cada persona puede tener una reacción diferente frente a las personas tóxicas, por lo que es esencial entender cómo nos afectan a nosotros de manera particular.
La prestigiosa psiquiatra Marian Rojas-Estapé recomienda intentar comprender por qué esa persona es tóxica para ti. Analiza si esa persona es tóxica para todos o solo para ti. Esto te ayudará a entender mejor la situación y a encontrar estrategias para lidiar con ella.
Algunas de las emociones que puedes experimentar al relacionarte con una persona tóxica son:
- Agotamiento de energía y optimismo: La relación con esa persona te consume energía y te hace sentir agotado emocionalmente.
- Dificultad para expresar tu opinión: Te cuesta expresar tu punto de vista o tus opiniones debido al miedo a su reacción negativa.
- Sentimientos de culpa o vergüenza: La persona tóxica te hace sentir culpable o avergonzado constantemente.
- Frustración constante: Tus esfuerzos por animar a la persona tóxica nunca son suficientes y te sientes frustrado.
- Miedo o cautela: Sientes miedo de estar cerca de esa persona y te sientes obligado a caminar con pies de plomo.
- Sensación de ser controlado: La persona tóxica intenta controlar tus acciones y decisiones.
¿Cómo enfrentar a una persona tóxica?
Si estás atrapado en una relación tóxica, ya sea romántica o no, es importante tomar medidas para proteger tu salud emocional y mental. Aunque alejarse de la persona tóxica puede ser la opción más fácil y efectiva, no siempre es posible. A continuación, te ofrecemos algunas estrategias para enfrentar a una persona tóxica de manera saludable:
- Analiza y describe las partes tóxicas de la persona: Identifica los comportamientos y actitudes tóxicas de esa persona.
- Pon contexto a la situación: Intenta comprender que detrás de esas conductas tóxicas puede haber miedos, frustraciones o vivencias traumáticas.
- Establece límites: Si no puedes evitar el contacto con la persona tóxica, establece límites claros en la relación. No permitas que invada tu intimidad y decide hasta dónde permites que esa persona acceda a ti.
- Relativiza su comportamiento: No entres en el juego de la persona tóxica y no te dejes afectar por sus críticas o manipulaciones.
- Utiliza la asertividad: Expresa tus opiniones y sentimientos de manera clara y respetuosa. No permitas que la persona tóxica te manipule o te haga sentir mal.
- Aprende a desconectar: Cuando la persona tóxica comience a quejarse o a consumir tu energía, aprende a desconectar y cuidarte a ti mismo.
Es importante recordar que, en casos más graves, puede ser necesario buscar la ayuda de un profesional de la salud mental, como un psicoterapeuta, para poder lidiar con la relación tóxica de manera adecuada.
Las personas tóxicas son aquellas que afectan negativamente nuestro bienestar emocional y mental. Identificar a estas personas y aprender a enfrentarlas de manera saludable es fundamental para proteger nuestra salud y bienestar. Recuerda que no todas las personas reaccionan de la misma manera ante las personas tóxicas y que cada relación puede tener diferentes grados de toxicidad. Establecer límites, utilizar la asertividad y cuidarte a ti mismo son algunas de las estrategias que puedes utilizar para enfrentar a una persona tóxica de manera saludable.