La migración es un fenómeno que conecta países, ciudades y comunidades, siguiendo patrones de movilidad que cambian según las condiciones políticas, sociales y económicas. Refleja historias compartidas, responde a necesidades económicas y fomenta lazos culturales. La migración presenta desafíos y oportunidades tanto para los migrantes como para las sociedades.
Importancia de la migración
Actualmente, hay alrededor de 258 millones de migrantes internacionales en el entorno, lo que representa aproximadamente el 4% de la población total. Estos migrantes contribuyen significativamente a la economía global, aportando aproximadamente USD 7 billones o el 4% del PIB mundial en 201Esto representa un aumento del 4% en comparación con si estos migrantes se hubieran quedado en sus países de origen. Además, el 90% de este beneficio económico es captado por los 25 países que reciben migrantes.
Los migrantes, ya sean de alta habilidad o de habilidad media o baja, aumentan la productividad. Por ejemplo, en Estados Unidos, los ciudadanos extranjeros presentaron la mitad de todas las patentes en 2015 y los inmigrantes y sus hijos cofundaron más del 40% de las compañías Fortune 500. En Arabia Saudita, 9 de cada 10 trabajadores en la industria de la construcción son extranjeros y migrantes, brindando apoyo a las mujeres para que puedan mantener o regresar a sus trabajos.
Además, los migrantes envían remesas a sus países de origen, lo que representa una importante fuente de ingresos para muchas economías. En 2017, los migrantes enviaron USD 466 mil millones a países de ingresos medios y bajos, más de tres veces la cantidad de ayuda oficial para el desarrollo. La movilidad internacional estudiantil también ha aumentado, brindando nuevas oportunidades para los jóvenes y promoviendo intercambios culturales.
A pesar de los beneficios económicos y sociales de la migración, también existen desafíos importantes. Por ejemplo, se estima que hay 25 millones de víctimas de trabajo forzoso en todo el entorno, de las cuales el 20% son explotadas y maltratadas en trabajos domésticos, fábricas, granjas, barcos pesqueros y sitios de construcción en el extranjero. Además, el tráfico de migrantes es un problema grave, generando ganancias de USD 5 a 7 mil millones para el crimen organizado. Se estima que en 2016 se traficaron 5 millones de migrantes y más de 4,800 migrantes perdieron la vida en su intento de llegar a otro país desde 201
Principios y objetivos para una migración segura y ordenada
Para maximizar los beneficios de la migración y minimizar sus riesgos, es crucial adherirse a tres principios básicos. En primer lugar, la migración debe estar en línea con las normas internacionales, respetando y protegiendo los derechos humanos de todas las personas, independientemente de su nacionalidad, raza, género, religión o estado migratorio.
En segundo lugar, la gestión de la migración no debe ser responsabilidad exclusiva de los ministerios del interior y del trabajo, sino que debe involucrar a todos los sectores del gobierno. La participación de los ministerios sociales, de salud, educación y extranjeros garantiza que las políticas migratorias promuevan los intereses de los países y eviten consecuencias no deseadas tanto para la sociedad de acogida como para los migrantes y sus comunidades. Además, es importante comunicar de manera efectiva información precisa sobre la migración para combatir la xenofobia y el racismo.
Finalmente, la migración es un tema transversal que requiere la participación de una amplia gama de actores, como autoridades locales, empleadores, sindicatos, sociedad civil y migrantes y sus comunidades. Estas asociaciones son fundamentales para comprender y abordar de manera integral los desafíos sociales, económicos y culturales de la migración.
Además de estos principios, tener en cuenta objetivos más amplios para una migración segura y ordenada. Esto incluye promover el bienestar socioeconómico tanto de los migrantes como de la sociedad de acogida, garantizar la protección de las personas desplazadas por razones de persecución, violencia o desastres naturales, y mitigar los riesgos asociados con la migración, especialmente para los más vulnerables. Para lograr estos objetivos, los países pueden implementar el Marco de Gobernanza de la Migración (MiGOF), que define y mide el progreso hacia la migración ordenada, segura y responsable.
La migración es un fenómeno complejo que presenta tanto desafíos como oportunidades. Para maximizar los beneficios de la migración y minimizar sus riesgos, es importante adherirse a principios básicos y objetivos más amplios. La migración segura y ordenada requiere el respeto de los derechos humanos, la participación de todos los sectores del gobierno, la comunicación efectiva de información precisa y la colaboración entre una amplia gama de actores. Al lograr una gestión adecuada de la migración, los países pueden aprovechar los beneficios económicos y sociales de la migración, al tiempo que protegen los derechos de los migrantes y las comunidades de acogida.