Los mitos y las leyendas han existido desde tiempos inmemoriales, y el lobizón es una de esas historias que ha perdurado a lo largo de los años. Esta criatura mitad hombre y mitad bestia, similar al hombre lobo europeo, es una leyenda muy popular en Argentina, Paraguay, Uruguay y el sur de Brasil. En este artículo, exploraremos las características y las historias asociadas con el lobizón.
¿Quién es el lobizón?
Según la mitología guaraní, el lobizón es el séptimo hijo varón de Taú y Keraná. Se dice que cuando este séptimo hijo alcanza la adolescencia, se transforma en lobizón. Esta criatura posee características similares a las de un perro fornido, con orejas grandes, pelaje abundante, patas y pezuñas, y ojos que parecen echar fuego. La leyenda también cuenta que el lobizón ataca a las personas que invaden su territorio.
¿Qué hace el lobizón?
El lobizón es conocido por hacer la vida imposible en el más allá y jugar con el destino de las almas. Según la leyenda, los martes y los viernes por la noche, el lobizón pierde su forma humana y se transforma en un perro de aspecto horrible o en un lobo de dientes afilados que ronda por los cementerios para alimentarse de los cadáveres. A medianoche, sale en busca de seres humanos para convertirlos en lobizones, asustándolos y pasando por debajo de sus piernas. Se dice que el lobizón tiene un olor nauseabundo y su aspecto congela la sangre en las venas y enloquece a las personas. Sin embargo, al amanecer, vuelve a su forma humana.
El ahijado presidencial
En Paraguay y Argentina, se ha establecido la tradición de que el Presidente de la Nación sea el padrino del séptimo hijo varón de una familia. Esta costumbre se remonta al siglo XIX, cuando los supersticiosos sacrificaban a su séptimo hijo por temor a que se convirtiera en lobizón. Aunque esta tradición se llevaba a cabo informalmente, en 1973 el presidente Juan Domingo Perón le dio un formato legal a través del decreto 848, conocido como la ley de padrinazgo presidencial. Esta ley otorga becas totales para estudios primarios y secundarios al séptimo hijo varón de cualquier familia.
El lobizón es una leyenda maravilloso que ha cautivado a generaciones en América del Sur. Aunque la ciencia desmiente este tipo de historias, la tradición y las creencias populares continúan transmitiendo la leyenda del lobizón. Su apariencia aterradora y su capacidad para transformar a las personas en lobizones han contribuido a su popularidad en la región. Ya sea que creas en estas historias o no, el lobizón sigue siendo una figura intrigante en la mitología sudamericana.