El historicismo es una corriente de pensamiento que considera toda la realidad como el producto de un devenir histórico. Surge en el siglo XIX y cuenta con importantes exponentes como Leopold von Ranke, Karl Marx, Benedetto Croce y Antonio Gramsci. Esta corriente concibe al ser como un proceso temporal, que no puede ser captado por la razón. Para el historicismo, la filosofía es un complemento de la historia y su objetivo principal es llevar a cabo una teoría de la historia.
Antecedentes del historicismo
La Escuela histórica del Derecho reconoce como antecedentes del historicismo la idea jurídica de los sofistas griegos en la antigüedad y las de Giambattista Vico en la Edad Moderna. Sin embargo, el historicismo alcanza su máximo desarrollo en Alemania con pensadores como Friedrich Karl von Savigny, Georg Friedrich Puchta y Gustav von Hugo. En Inglaterra, Edmund Burke también critica duramente el movimiento político de la Revolución Francesa, señalando la importancia de inspirar toda acción social en la historia, el hábito y la religión.
Objetivos del historicismo
El objetivo principal del historicismo es llevar a cabo una teoría de la historia a través de una exploración sistemática de los hechos históricos. Según esta corriente, los hechos científicos, artísticos, técnicos, políticos o religiosos pueden ser considerados hechos históricos porque tienen importancia para la vida del hombre. El historicismo sostiene que no debe existir una teoría histórica con esquemas previos que imponga sobre el pasado. El historiador debe permitir que el pasado hable a través de los documentos escritos oficiales.
Leopold von Ranke, uno de los principales exponentes del historicismo, postula que es el pasado el que debe hablar y critica a los autores anteriores que recurren a la novela en lugar de acudir a los documentos para conocer con certeza lo que ha ocurrido. Ranke establece un enfoque filológico que se basa en el uso de fuentes documentales para llevar a cabo una historia precisa y objetiva.
Principales exponentes del historicismo
Entre los principales exponentes del historicismo destacan Benedetto Croce y Giambattista Vico. Benedetto Croce, además de destacarse como historiador y político, desarrolla una teoría fuertemente historicista que influye en autores como Antonio Gramsci y Giovanni Gentile. Según Croce, la historia tiene un horizonte gnoseológico y es un conocimiento contemporáneo que nos permite comprender la racionalidad más profunda del proceso del espíritu.
Giambattista Vico, por su parte, es conocido por su concepto de verdad como resultado del hacer y se opone al cartesianismo y a la concepción de su tiempo que hacía de la física la ciencia paradigmática. Vico sostiene que el hombre puede conocer lo que es producto de su hacer y que solo Dios puede tener una comprensión total de todo.
El historicismo, como corriente de pensamiento, plantea una visión crítica sobre la importancia de la historia en la comprensión de la realidad. Considera que el ser humano no tiene una naturaleza inmutable, sino que está inmerso en un devenir histórico. El objetivo del historicismo es llevar a cabo una teoría de la historia a través de una exploración sistemática de los hechos históricos. Sus principales exponentes, como Benedetto Croce y Giambattista Vico, han contribuido al desarrollo de esta corriente y han dejado un legado importante en el campo de la filosofía y la historiografía.