El Cordobazo fue un hito en la historia de Argentina. Ocurrió el 29 y 30 de mayo de 1969, cuando los trabajadores de Córdoba llevaron a cabo una huelga general con movilización que logró desestabilizar al gobierno militar liderado por Juan Carlos Onganía. Este importante evento marcó un antes y un después en la lucha obrera y en la resistencia contra la dictadura en el país.
El contexto del Cordobazo
En aquellos años, el régimen militar de Onganía imponía políticas restrictivas al movimiento obrero y a la clase trabajadora en general. Una de las medidas más controvertidas fue el congelamiento de salarios, implementado por el ministro de Economía Adalbert Krieger Vasena. Además, se derogó la Ley del sábado inglés, que establecía el pago doble de las horas trabajadas después de las 13:00 los sábados.
En la ciudad de Córdoba, donde se concentraba la industria automotriz y metalmecánica, el rechazo a estas medidas fue generalizado. El movimiento obrero, encabezado por dirigentes sindicales como Agustín Tosco, de la izquierda clasista, y Elpidio Torres, del sindicato Smata, rápidamente se unieron para organizar una huelga general y manifestar su descontento contra el gobierno de Onganía.
El desarrollo del Cordobazo
El viernes 29 de mayo de 1969, los trabajadores cordobeses llevaron a cabo un paro con alto acatamiento. Ante esta situación, el gobernador de facto Carlos Caballero decidió aumentar los salarios de la Policía como respuesta. Sin embargo, esto no hizo más que aumentar la indignación de los manifestantes.
El jueves 29, la ciudad de Córdoba amaneció sitiada por la Policía, que bloqueó los puentes sobre el río Suquía para evitar la movilización de los trabajadores. A pesar de los gases lacrimógenos y las ráfagas de FAL, los manifestantes lograron superar los bloqueos y avanzar hacia el centro de la ciudad.
La respuesta del gobierno fue enviar a la Fuerza Aérea para sobrevolar la ciudad y mantener el control. Aunque el Ejército evitó el combate nocturno, recuperó el control de la ciudad en las primeras horas de la mañana del viernes 30, dispersando a los últimos grupos de manifestantes.
Las consecuencias del Cordobazo
El Cordobazo tuvo un impacto significativo tanto a nivel político como social. En términos políticos, el gobierno de Onganía perdió legitimidad y se vio obligado a renunciar el ministro Krieger Vasena menos de una semana después del Cordobazo. Este evento marcó el inicio de una serie de protestas y movilizaciones que finalmente llevarían al derrocamiento de Onganía en 1970.
A nivel social, el Cordobazo sirvió como un ejemplo de resistencia y lucha para el movimiento obrero y para la sociedad en general. Fue un momento en el cual los trabajadores demostraron su capacidad de organización y su determinación para enfrentarse a la opresión y las políticas injustas del gobierno.
El Cordobazo fue un acontecimiento trascendental en la historia de Argentina. Fue la manifestación de la fuerza y la voluntad de los trabajadores de Córdoba para enfrentarse a la dictadura y luchar por sus derechos. Este evento dejó un legado de lucha y resistencia que aún hoy perdura en la memoria colectiva del país.