Los Caballeros Templarios, pertenecientes a la Orden del Temple, fueron una de las órdenes militares cristianas más poderosas de la Edad Media. Eran monjes guerreros que defendían a los cristianos que peregrinaban a Jerusalén, Tierra Santa, tras su conquista en la Primera Cruzada en 109La orden se creó entre 1118 y 1119 al ofrecer Hugo de Payns y otros nueve caballeros sus servicios al rey Balduino II de Jerusalén para defender a los soldados que regresaban de las batallas en Oriente.
La creación de los Templarios
Los Caballeros Templarios fueron fundados por Hugo de Payns y otros nueve caballeros que ofrecieron sus servicios al rey Balduino II de Jerusalén. Su objetivo principal era brindar protección a los soldados que regresaban de las batallas en Oriente. Pronto se ganaron una reputación de hombres honestos y valerosos, lo que les llevó a recibir donaciones de la nobleza para reforzar la seguridad de los peregrinos que viajaban a Jerusalén.
Además de su labor como guerreros, los Templarios también se destacaron por su gestión financiera. Crearon libros de cuentas y pagarés, lo que les dio fama de ser gestores intachables. Esto llevó a que nobles y reyes de la época confiaran en ellos para salvaguardar sus riquezas. Incluso los peregrinos comenzaron a dejar su dinero en las encomiendas templarias que había en Francia, utilizando una especie de cuenta corriente que les permitía disponer de su dinero de forma inmediata durante su viaje.
La influencia de los Templarios
La influencia de los Caballeros Templarios se extendió más allá de la protección de los peregrinos y la gestión financiera. También utilizaron su poder e influencia para realizar transferencias de fondos entre diferentes países, como Francia e Inglaterra, y enviar recursos a las tropas en Jerusalén. Su papel en la banca medieval fue una de las primeras manifestaciones de la banca moderna.
El fin de los Templarios
A pesar de su poder e influencia, los Caballeros Templarios también cosecharon enemigos. Su riqueza y poder despertaron la envidia de otros, incluyendo a la Iglesia y a la corona francesa. En 1307, el rey Felipe IV de Francia ordenó la detención de los templarios bajo acusaciones de herejía y otros delitos. Muchos templarios fueron arrestados, torturados y ejecutados.
La Orden del Temple fue finalmente suprimida en 1312 por el Papa Clemente V. Sus bienes y propiedades fueron confiscados y muchos templarios fueron condenados a muerte. Sin embargo, algunos templarios lograron escapar y se presume que se refugiaron en otros países o se unieron a otras órdenes militares.
Legado de los Caballeros Templarios
Aunque la Orden del Temple fue suprimida, el legado de los Caballeros Templarios perdura hasta el día de hoy. Su imagen y simbología han sido objeto de fascinación y misterio a lo largo de los siglos. Se les atribuyen numerosas leyendas y teorías conspirativas, lo que ha alimentado su fama y misterio.
Los Caballeros Templarios fueron una orden militar cristiana que se destacó por su labor de protección a los peregrinos en Tierra Santa y su gestión financiera. Su poder e influencia despertaron la envidia de otros, lo que finalmente llevó a su supresión. A pesar de ello, su legado y misterio perduran en la actualidad.