Byung-Chul Han, un filósofo surcoreano que ha vivido en Alemania durante más de 40 años, ha analizado en profundidad los problemas y desafíos de la sociedad contemporánea. En su obra, destaca la velocidad, la transparencia, el rendimiento y la depresión como características dominantes de nuestra época. Para Han, vivimos en una sociedad marcada por la autoexplotación, donde creemos ser libres pero en realidad somos esclavos del capitalismo y de nuestra propia voluntad. En este artículo, exploraremos 10 consejos basados en el pensamiento de Byung-Chul Han para sobrevivir en la sociedad actual.
Practica el arte de la demora
Según Han, la velocidad es una forma de violencia que nos impide pensar y sentir con profundidad. Por eso, propone practicar el arte de la demora, que consiste en ralentizar el ritmo de nuestra vida y dedicar tiempo a lo que realmente importa. La demora nos permite reflexionar, crear, disfrutar y resistir al imperativo de la productividad.
Cultiva el silencio
Otro consejo de Han es cultivar el silencio, tanto interior como exterior. El silencio es una condición para escuchar nuestra voz interior, para dialogar con los demás y para apreciar la belleza del entorno. También es una forma de protesta contra el ruido y la distracción que nos impiden concentrarnos y meditar.
Protege tu intimidad
Han critica la sociedad de la transparencia, donde todo se vuelve visible y se somete al escrutinio público. Para él, la transparencia es una forma de control y de violación de nuestra intimidad. Por eso, recomienda proteger nuestra esfera privada, no exponer nuestra vida en las redes sociales y no dejarnos manipular por los algoritmos que nos vigilan y nos condicionan.
Acepta la negatividad
Según Han, la sociedad actual nos impone una positividad excesiva, que nos obliga a ser felices, optimistas y exitosos todo el tiempo. Esta positividad nos genera estrés, ansiedad y depresión al no poder cumplir con las expectativas sociales. Por eso, Han nos aconseja aceptar la negatividad, que es parte de la vida y de nuestra condición humana. La negatividad nos permite experimentar el dolor, el fracaso, el duelo y el límite, que son fuentes de aprendizaje y de crecimiento.
Recupera el ritual
Otra propuesta de Han es recuperar el ritual, entendido como una práctica simbólica que nos conecta con lo sagrado, con lo comunitario y con lo histórico. El ritual nos ayuda a dar sentido a nuestra existencia, a celebrar los momentos importantes de nuestra vida y a transmitir nuestra cultura y nuestros valores. También nos permite escapar del tiempo lineal y acelerado de la sociedad actual y entrar en un tiempo circular y pausado.
Valora lo diferente
Han denuncia que la sociedad actual es un infierno de lo igual, en el que se elimina toda diferencia y se impone una homogeneización cultural. Para él, lo diferente es una fuente de riqueza, de creatividad y de diálogo. Por eso, nos invita a valorar lo diferente, a respetar la diversidad y a aprender de otras culturas, formas de pensar y formas de vivir.
Practica el cuidado
Otro consejo de Han es practicar el cuidado, tanto hacia nosotros mismos como hacia los demás. El cuidado implica atender nuestras necesidades físicas, emocionales y espirituales, así como las necesidades de las personas que nos rodean. También implica cuidar del planeta, del medio ambiente y de los seres vivos que lo habitan. El cuidado es una forma de amor, de responsabilidad y de solidaridad.
Busca el equilibrio
Según Han, la sociedad actual nos empuja constantemente hacia un desequilibrio, al exigirnos más de lo que podemos dar y al no dejarnos descansar. Por eso, nos recomienda buscar el equilibrio, que consiste en armonizar nuestras dimensiones físicas, mentales y espirituales, así como nuestras actividades laborales, familiares y personales. El equilibrio nos permite vivir con salud, paz y alegría.
Desarrolla tu pensamiento crítico
Otro consejo de Han es desarrollar nuestro pensamiento crítico, que es la capacidad de analizar, cuestionar y evaluar la información que recibimos y las opiniones que tenemos. El pensamiento crítico nos ayuda a formar nuestro propio criterio, a defender nuestros derechos y a participar activamente en la sociedad. También nos protege de la manipulación, la desinformación y la alienación.
Sé auténtico
Por último, Han nos aconseja ser auténticos, es decir, ser fieles a nosotros mismos y a nuestros valores. Ser auténticos implica no dejarnos influir por las modas, las tendencias o las presiones sociales, sino seguir nuestro propio camino y expresar nuestra propia voz. También implica reconocer nuestras fortalezas y debilidades, nuestras virtudes y defectos, y aceptarnos tal como somos.
Byung-Chul Han nos invita a cuestionar y resistir las dinámicas de la sociedad del cansancio en la que vivimos. A través de la demora, el silencio, la protección de nuestra intimidad, la aceptación de la negatividad, la recuperación de los rituales, la valoración de la diferencia, la práctica del cuidado, la búsqueda del equilibrio, el desarrollo del pensamiento crítico y la autenticidad, podemos encontrar formas de liberarnos y recuperar el sentido de la vida en una sociedad dominada por la velocidad y la presión del rendimiento.