Rosa Montero, reconocida escritora española, nos presenta su última novela la carne (Alfaguara), una obra que aborda temas como la soledad, el miedo a vivir y la capacidad de reconstruir una vida feliz a pesar de los obstáculos. Aunque fue escrita antes de la pandemia, Montero menciona que el confinamiento influyó en la corrección final de la novela, lo que podría reflejarse en futuras obras literarias que traten sobre la experiencia de la soledad y el aislamiento.
¿Qué tipo de narrador utiliza Rosa Montero en la carne ?
En la carne, Montero utiliza diferentes voces narrativas para contar la historia. La voz de Raluca, uno de los personajes principales, se presenta en primera persona, mientras que la voz de Benito también se presenta en primera persona. Además, la novela cuenta con un narrador omnisciente en presente, que interviene en la historia de manera peculiar. Esta combinación de voces narrativas le da a la novela un ritmo ágil y dinámico, atrapando al lector en la intriga y los enigmas de la trama.
La buena suerte y la importancia de creer en ella
Uno de los temas centrales de la carne es la idea de la buena suerte y la importancia de creer en ella. Raluca, uno de los personajes más especiales de la novela, sostiene que la buena suerte es nuestra capacidad de creer en ella, de buscarla y de no rendirnos. Ella afirma que la forma en que nos contamos a nosotros mismos nuestra propia vida puede salvarnos o condenarnos. Raluca es un personaje con una fuerza vital increíble, capaz de deshacer todas las sombras de la novela y convertirse en la salvadora de todos.
La construcción de la novela y su estilo narrativo
Montero describe el proceso de escritura de una novela como un dibujo tridimensional lleno de colores y movimiento que se enciende en la cabeza del escritor. Sin embargo, el reto está en trasladar ese ritmo y esa belleza al papel. Para lograrlo, Montero afirma que se necesita práctica y dedicación, ya que escribir es un oficio que se aprende escribiendo. Además, destaca la importancia de la revisión y reescritura para perfeccionar el estilo narrativo.
La carne se caracteriza por su ritmo rápido y la dosificación milimétrica de la información, lo que mantiene al lector atrapado en la intriga y renovando constantemente los enigmas de la trama. Las descripciones del pueblo, la casa y los personajes, como Benito, son ejemplos claros del estilo narrativo de Montero, que destaca por su precisión y capacidad para crear imágenes vívidas en la mente del lector.
La influencia de la pandemia en la escritura
Aunque la carne fue escrita antes de la pandemia, Montero menciona que la corrección final se realizó durante el confinamiento. Sin embargo, los cambios realizados fueron únicamente literarios y no reflejaron directamente la situación de la pandemia. Montero también revela que ya tiene varios libros en mente para los próximos años y está trabajando en un ensayo sobre creación y locura, en la línea de sus obras anteriores la ridícula idea de no volver a verte y la loca de la casa.
La literatura después de la pandemia
Montero reflexiona sobre cómo la literatura abordará los primeros meses de 2020 y menciona que es posible que no se refleje directamente la pandemia en las obras literarias, sino que se traten temas relacionados con la soledad y el aislamiento de una forma más simbólica. La autora plantea la posibilidad de que surjan novelas que hablen de experiencias de soledad y aislamiento, pero no necesariamente enfocadas en la pandemia, sino en situaciones como la vida de un farero en una isla remota. Será interesante ver cómo los escritores interpretan y digieren estos tiempos tan extraños y cómo lo transforman en literatura.
La carne de Rosa Montero es una novela que aborda temas como la soledad, el miedo a vivir y la capacidad de reconstruir una vida feliz. A través de diferentes voces narrativas y un estilo ágil y dinámico, Montero logra atrapar al lector en la intriga y los enigmas de la trama. Aunque escrita antes de la pandemia, la novela fue corregida durante el confinamiento, lo que podría influir en futuras obras literarias que traten sobre la experiencia de la soledad y el aislamiento. Montero reflexiona sobre el proceso de escritura y la importancia de creer en la buena suerte. En resumen, la carne es una obra que nos invita a reflexionar sobre la vida y la capacidad que tenemos para reconstruirnos a nosotros mismos.