En el entorno empresarial actual, los consumidores valoran cada vez más la responsabilidad de las empresas antes de tomar decisiones de compra. En este sentido, una compañía que busca tener éxito y futuro no puede centrarse únicamente en obtener beneficios, sino que debe desarrollar una serie de principios éticos que aporten valor a la sociedad.
¿Qué es la ética de la empresa?
La ética empresarial, también conocida como ética de los negocios, se refiere al conjunto de normas y valores que rigen las acciones y decisiones de una organización en el desarrollo de su actividad. Su objetivo es crear una cultura profesional y ética en la que los valores de la empresa estén alineados con la forma de actuar y, al mismo tiempo, se logre una mayor armonía con la sociedad.
Según Adela Cortina, directora de la Fundación para la Ética de los Negocios y las Organizaciones (ÉTNOR), la ética en la empresa consiste en el descubrimiento y la aplicación de los valores y normas compartidos por una sociedad pluralista al ámbito peculiar de la empresa. En otras palabras, se trata de un instrumento que permite mejorar aspectos como el entorno y el clima laboral, promover la igualdad y el respeto a los derechos humanos.
Algunos ejemplos de conductas éticas en el ámbito empresarial incluyen actuar conforme a principios como la igualdad, la libertad, el respeto y la solidaridad, desarrollar una cultura organizacional basada en el diálogo y valores comunes para todos los miembros de la empresa, e integrar criterios ambientales, sociales y éticos en su actuación.
Ventajas de la ética en los negocios
Aplicar la ética en la empresa es importante por varias razones. En primer lugar, garantiza que la empresa se mantenga dentro de los límites de la legalidad, evitando casos de corrupción y vulneración de derechos. Además, mejora la imagen empresarial y genera confianza entre los consumidores, lo que puede traducirse en un mayor valor de marca y más clientes. Ser una empresa ética también resulta atractivo para los accionistas e inversores.
Por último, seguir la ética en la empresa beneficia a los trabajadores y al funcionamiento de la organización. Incrementa la satisfacción de la plantilla, lo que se traduce en una mayor dedicación y motivación para el trabajo, y ayuda a retener y atraer talento humano. La aplicación de la ética en la empresa conlleva los siguientes beneficios principales:
- Conformidad y responsabilidad legal.
- Mejora de la reputación corporativa.
- Generación de confianza entre los empleados, clientes e inversores.
- Mayor satisfacción y motivación de los empleados.
- Atracción de talento humano.
- Preservación e incremento del valor de la compañía.
¿Cómo aplicar la ética en la empresa?
Existen diversas herramientas para integrar la ética en los negocios y las organizaciones. Algunas de las más comunes son:
Código ético
Es un documento formal que recopila los valores, principios y pautas éticas que la empresa asume voluntariamente en el desempeño de su actividad. Sirve como los miembros de la organización y establece normas que regulan los comportamientos de las personas dentro de la compañía. Algunos ejemplos de postulados que suelen incluirse en los códigos éticos son la no divulgación de información confidencial y la no discriminación por motivos de raza o religión.
Comité de ética
Es el órgano encargado de promover y vigilar el cumplimiento del código ético en la organización. Se ocupa del seguimiento y control de los compromisos adquiridos en el código de ética. Además, asesora en la búsqueda de soluciones a dilemas y conflictos éticos internos y externos. El comité debe ser multidisciplinario y representar a todos los estamentos de la empresa y grupos de interés.
Auditoría ética
Es un sistema de información pública que busca la transparencia y evalúa el desempeño ético en la organización. La auditoría ética complementa la información económica con aspectos sociales y medioambientales, sometiéndola al criterio de un asesor externo.
Las empresas deben velar por el interés propio y el de todos los afectados por su actividad, así como por el bienestar de la sociedad en general. Incorporar la ética en la empresa ayuda a mejorar la reputación social y generar confianza tanto entre los empleados como entre los consumidores, que demandan cada vez más transparencia, honestidad y compromiso con el entorno.
Consultas habituales sobre la ética en la empresa
¿Qué significa ética?
La ética proviene del griego ethos y se refiere al conjunto de principios y reglas morales que regulan el comportamiento y las relaciones del ser humano. Establece lo que es correcto e incorrecto, lo bueno y lo malo respecto a una acción o una decisión.
¿Cuándo y dónde surge la ética empresarial?
El término ética empresarial surgió en Estados Unidos en la década de 1970 y posteriormente se extendió a Europa, donde en 1987 se creó la Red Europea de Ética Empresarial (EBEN). En la primera década del siglo XXI, la ética de la empresa comenzó a adquirir gran relevancia.
¿Cuáles son los principios fundamentales de la ética empresarial?
La ética empresarial se basa en valores universales que deben coincidir con aquellos que comparte la sociedad. Algunos de los principios fundamentales de la ética de los negocios son:
- Honestidad
- Integridad
- Respeto
- Responsabilidad
- Equidad
- Transparencia
- Justicia
- Solidaridad
- Sostenibilidad
- Confianza
Estos valores éticos son imprescindibles para que una empresa sea considerada ética en su actuación.
La ética de la empresa según Adela Cortina se refiere al conjunto de principios y valores que rigen las acciones y decisiones de una organización en el desarrollo de su actividad. Aplicar la ética en la empresa tiene diversas ventajas, como mantenerse dentro de los límites de la legalidad, mejorar la reputación corporativa, generar confianza, aumentar la satisfacción y motivación de los empleados, atraer talento y preservar e incrementar el valor de la compañía. Para implementar la ética en la empresa, se pueden utilizar herramientas como el código ético, el comité de ética y la auditoría ética. La ética empresarial es fundamental en el entorno actual, donde los consumidores demandan cada vez más transparencia, honestidad y compromiso con el entorno.