La Norma Internacional de Contabilidad 18 (NIC 18) trata sobre el reconocimiento de ingresos ordinarios en los estados financieros. Esta norma es aplicable a todas las entidades que emiten estados financieros de acuerdo con las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF).
¿Qué se entiende por ingresos ordinarios?
Los ingresos ordinarios se refieren a los flujos de beneficios económicos que provienen de las actividades normales de una entidad, como la venta de bienes, la prestación de servicios o el uso de activos por parte de otros. Estos ingresos se reconocen cuando se han obtenido y es probable que la entidad reciba los beneficios económicos asociados a ellos.
La NIC 18 establece que para reconocer un ingreso ordinario, deben cumplirse los siguientes criterios:
- El importe del ingreso puede ser medido de manera confiable.
- Es probable que la entidad reciba los beneficios económicos asociados al ingreso.
- Los criterios de reconocimiento específicos para cada tipo de ingreso se cumplen.
- Los costos incurridos o por incurrir en relación con el ingreso se pueden medir de manera confiable.
¿Cuál es la diferencia entre ingresos ordinarios y extraordinarios?
La diferencia principal entre los ingresos ordinarios y los ingresos extraordinarios radica en su naturaleza y origen. Los ingresos ordinarios provienen de las actividades normales y recurrentes de una entidad, mientras que los ingresos extraordinarios son aquellos que no son parte de las operaciones habituales de la entidad y se consideran eventos no recurrentes o no usuales.
Los ingresos extraordinarios pueden surgir de eventos no relacionados con las actividades principales de la entidad, como la venta de un activo no utilizado o la resolución de una disputa legal. Estos ingresos suelen ser de naturaleza impredecible y no se espera que se repitan en el futuro.
Por otro lado, los ingresos ordinarios son generados de manera regular y son parte integral del funcionamiento normal de la entidad. Estos ingresos son predecibles y se espera que se repitan en el futuro, ya que están relacionados con las actividades principales de la entidad.
La NIC 18 establece los criterios para el reconocimiento de los ingresos ordinarios en los estados financieros de una entidad. Los ingresos ordinarios son aquellos que provienen de las actividades normales y recurrentes de la entidad, y se reconocen cuando se han obtenido y es probable que la entidad reciba los beneficios económicos asociados a ellos. Por otro lado, los ingresos extraordinarios son eventos no recurrentes o no usuales y no forman parte de las operaciones habituales de la entidad.