El cuento de Alí Babá y los 40 ladrones es una historia que forma parte de las famosas Mil y una noches. En este relato, se narra la vida de Alí Babá, un humilde leñador que se dedica a comerciar con la carga de tres asnos para poder mantener a su familia.
La búsqueda de la riqueza
La vida de Alí Babá cambia radicalmente cuando escucha accidentalmente a un grupo de ladrones revelando la ubicación de su tesoro en una cueva del bosque. La cueva está mágicamente protegida, y se puede abrir diciendo las palabras ábrete, sésamo y cerrar con ciérrate, sésamo.
Alí Babá decide aprovechar esta oportunidad y entra en la cueva para llevarse parte del tesoro a su casa. Sin embargo, su hermano rico, Casim, la repentina riqueza de Alí y comienza a sospechar de la fuente de su fortuna.
La traición y la venganza
Casim convence a Alí Babá para que le revele la ubicación de la cueva, pero olvida las palabras mágicas para salir de ella. Los ladrones descubren a Casim en la cueva y lo matan. Alí Babá, preocupado por su hermano, va en su búsqueda y logra enterrarlo sin levantar sospechas.
Los ladrones, al darse cuenta de que alguien más conoce su secreto, deciden localizar a Alí Babá. Sin embargo, sus intentos son frustrados en varias ocasiones gracias a la astucia y lealtad de Morgiana, una esclava que ahora trabaja para la familia de Alí.
Finalmente, los ladrones descubren la ubicación de la casa de Alí y el jefe de la banda se hace pasar por un comerciante de aceite. Llega a la casa de Alí con mulas cargadas de tinajas, una de ellas llena de aceite y las otras treinta y nueve con los ladrones escondidos.
Morgiana, nuevamente, logra descubrir el plan de los ladrones y los mata llenando las tinajas de aceite hirviendo. El jefe de los ladrones logra escapar, pero en un acto de venganza, se hace pasar por un mercader y se acerca al sobrino de Alí Babá.
El final feliz
Morgiana reconoce al jefe de los ladrones y decide ejecutar una danza con una daga en honor de los comensales durante una cena. Aprovechando la distracción, Morgiana clava la daga en el corazón del ladrón, poniendo fin a su amenaza.
Así, la historia de Alí Babá y los 40 ladrones termina de forma feliz para todos, excepto para los ladrones y Casim. Alí Babá aprende la importancia de la lealtad y la astucia, mientras que Morgiana se convierte en la verdadera protagonista de la historia gracias a su valentía y perspicacia.