La tarde del martes a la caída del sol nos encontró nuevamente reunidos en un improvisado living, en el piso 12 de WeWork Torre Bellini, compartiendo unos tequeños y buena charla con los amigos que se acercaron a Startup Grind Buenos Aires para escuchar a Silvia Torres Carbonell, destacada empresaria, docente, mentora y gran impulsora del circuito emprendedor local y global.
Dando inicio al evento, Julio Castro, director del capítulo, presentó a Sebastián Pérez y Joaquín Hernández de RSK, una plataforma P2P sobre Bitcoin que permite la ejecución de contratos inteligentes. Mucho interés y un nutrido intercambio con el público suscitó también el emprendimiento de Martín Gómez y Miguel Warlies: Wymaq, un marketplace que conecta propietarios de maquinarias para construcción y prestadores de servicios con usuarios calificados a través de procesos eficientes.
Ya adentrándose en la entrevista central, con su habitual estilo ameno y cálido, Julio fue conduciendo a Silvia por su infancia en Buenos Aires, su recorrido escolar, y su temprana inclinación por la docencia: de pequeña sentaba a sus muñecas y les enseñaba lo que había aprendido en el colegio. Su interés por las matemáticas y las humanidades la llevaron luego a conjugar los estudios de contaduría y psicopedagogía.
Empresaria, docente, mentora
Su paso por la universidad selló su vocación empresaria dando origen a Villa Alpina, un emprendimiento que fundó en conjunto con su profesor y que fue pionero en la provisión de agua en botellones y dispensers, un sistema hasta el momento inexistente en el mercado local. Sus primeros clientes fueron empresas, generó trabajo para 250 personas, y se destacó por la innovación en logística y en el sistema organizacional, siendo posteriormente adquirida por Danone.
Con una compleja coyuntura de hiperinflación en el país, y en una época en la que no había conciencia de estar emprendiendo, no se hablaba de emprendedores, ni existían el apoyo del gobierno, de la sociedad civil, la tecnología y el acceso al conocimiento actualmente disponibles, había logrado crear un proyecto desde cero, brindando trabajo a muchas familias y dando forma a una empresa que fue luego valorada por la multinacional alimenticia.
Durante la gestión de Villa Alpina se formó en el Programa de Alta Dirección en el IAE y fue profesora de Desarrollo Emprendedor en la UCA. En 1998, luego de su retiro de la empresa, fue convocada por el IAE para liderar un programa del BID apuntado a la formación de emprendedores, lo que la llevó a visitar diversos institutos extranjeros para relevar lo que se estaba enseñando en otros países y darle forma al plan de estudios. A su vuelta propuso al IAE crear el Centro de Emprendedores y dio nacimiento a la competencia Naves, abierta a todo emprendedor que quiera presentar su proyecto, y que este año reúne 940 proyectos.
Silvia destaca que si bien al principio eran muy pocos los alumnos de sus clases que levantaban la mano cuando preguntaba quiénes deseaban emprender, la tendencia ha ido en aumento y cada año crece la cantidad de personas con vocación emprendedora que cursan sus programas.
Emprender, una característica indisociable de la humanidad
Uno de los conceptos más relevantes que nos transmitió Silvia es la idea de que emprender no es un privilegio reservado a unos pocos sino una característica inherente al ser humano, una pulsión innata enraizada en el espíritu de supervivencia y en la curiosidad que lleva al hombre a cuestionarse el entorno e intentar mejorar lo que tiene alrededor, evolucionar. Su admiración por el Creador no desconoce que el ser humano tiene la capacidad de co-crear, de mejorar lo que le es dado. “Emprender no es un tema de personalidad sino de actitud y comportamiento, de hacerse protagonista”, comparte.
Entendiende que el emprender se basa en tres patas: formación, investigación y financiamiento, abonó cada una de ellas involucrándose directamente:
* Los emprendedores nacen, pero también hay que hacerlos; por eso fundó el Centro de Emprendedores del IAE que dirige y del que es docente.
* Es necesario investigar y medir, para entender por qué tiene sentido promover a los emprendedores; por eso participa del board de diversas organizaciones nacionales y globales de investigación, monitoreo y apoyo a la actividad emprendedora.
* Para promover el financiamiento de emprendimientos, fundó el Club de Business Angels en la época en que estaba surgiendo Endeavor.
Emprendedor, empresario e impacto
Un emprendimiento no necesariamente tiene origen en una idea maravillosa e innovadora, sino en el entendimiento profundo de un problema. Para emprender es necesario hacerse experto en el problema que se quiere solucionar, enamorarse del problema, investigar cómo se resuelve en otros lugares. El emprendedor identifica una necesidad y captura una oportunidad, transformándola en una empresa.
Muchos emprendedores son buenos para tener ideas creativas, pero no tienen herramientas para gestionar una organización que crece. Es necesario que los emprendedores se conviertan en empresarios y lideren con impacto, que generen bienes y servicios para mejorar la vida de la sociedad. La búsqueda de la rentabilidad no puede estar disociada del impacto y el propósito.
“Afortunadamente hay cada vez más emprendedores con propósito y vocación de impacto en la esencia de las empresas, con un blend de ambición + necesidad, propósito + beneficio”, comparte.
La mujer emprendedora
Nunca sintió su condición de mujer como una desventaja sino como algo positivo, y trabaja activamente por el acceso de la mujer a las mismas oportunidades que los hombres. Hombres y mujeres tienen roles complementarios en el mundo, y se requiere desarrollar la capacidad de integración de las visiones femenina y masculina para trascender la polaridad, asegurar el acceso equitativo a las oportunidades y garantizar la igualdad de retribución por el mismo trabajo.
En línea con su labor como mentora y promotora de las mujeres en el ambiente emprendedor, es pieza clave de WISE, Women in STEAM Entrepreneurship, un programa implementado por el BID para promover a las mujeres emprendedoras en ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemática.
El panorama emprendedor local: la Argentina bipolar
El análisis de la situación local la llevó a acuñar alguna vez la expresión de “la Argentina bipolar”: un país con grandes deficiencias y situaciones adversas de larga data, pero con una contracara de abundancia de emprendedores, proyectos, talento, que es necesario poner al servicio de encontrar soluciones nuevas a problemas viejos. Su aspiración es encontrar el litio para la Argentina bipolar.
En Argentina el financiamiento no es fácil. Aunque en principio la fuente de financiamiento de los emprendimientos suele ser la triple f: family, friends & fools, hoy existe un abanico de redes de financiamiento que incluye inversores ángeles, aceleradoras, matching funds promovidos por el gobierno. El ecosistema local se está consolidando y profesionalizando, no sólo del lado de los emprendedores sino también del de los inversores.
Los ámbitos en los que se observa mayor evolución y perspectivas de crecimiento son: MercadoLibre, que se transforma permanentemente ofreciendo nuevas opciones; las fintech y las finanzas inclusivas; el agtech. Cuando empiecen a converger estas tecnologías con biotech, IA, IoT y otras, va a ser verdaderamente disruptivo. La convergencia permitirá acometer los problemas juntos desde las distintas aristas y encontrar soluciones disruptivas.
Emprender con valores
Apasionada de la tecnología como herramienta de transformación, transmite la necesidad de aplicarla con sabiduría: el fuego sirve para cocinar, pero también para quemar Roma.
“Tenemos mentes paleolíticas, instituciones medievales y tecnologías de los dioses”, cita. Hoy la tecnología es exponencial en cuanto a velocidad, extensión y transversalidad: cualquier avance impacta en muchas disciplinas. La tecnología es poderosa y hay que usarla bien. Emprender con valores. Éste es un concepto que se repite a lo largo de la charla, y que cada vez nos resuena como una necesidad ineludible.
El capital social
En el punto alto en la charla, irrumpe: “El capital social es el más valioso que uno puede tener, que seas confiable para tus vínculos. El capital social es el que trae todo el resto de los capitales”. Se construye en base a la confianza y el respeto, implica estar dispuesto a dar antes de recibir. Demora mucho tiempo en construirse y se destruye muy fácilmente, por lo que es necesario abonarlo, cuidarlo. Nuevamente se escucha: “Emprender con valores”.
La familia y el equilibrio
Cuenta que en todas sus actividades integró siempre a su familia. Conoció a su esposo durante su primer año en la facultad y su matrimonio de 42 años les ha dado 3 hijos y 8 nietos. Expresa la importancia de la elección de la pareja con un proyecto común de vida, en el que su faceta emprendedora se ve potenciada por el apoyo de su esposo. Sus hijos son también emprendedores, y disfruta de sus nietos jugando a armar empresas cuando los invita a una piyamada en su casa.
Destaca la necesidad de mantener un equilibrio entre la actividad profesional y la vida familiar. “Pensar cómo queremos ser recordados”, dice. “La vida integrada es clave, porque no somos personas diferentes en el trabajo, la familia y como ciudadanos.”
Así es como emprendió hace 20 años junto con su familia la creación de la Fundación Ruta 40, que apoya a escuelas a lo largo de la ruta 40 que va de norte a sur de país, desde La Quiaca hasta Tierra del Fuego, y que actualmente apoya a 65 escuelas.
Con calidez y humor, Silvia nos fue compartiendo generosamente su recorrido de vida y sus conceptos rectores. Valores, equilibrio, el emprendimiento como factor inherente al hombre.
La noche envuelve los ventanales del piso 12 y la ciudad brilla abajo, pulsante. El público pregunta, se acerca, se mezcla. El intercambio se intensifica; conversamos animadamente, compartimos una última cerveza y algún teléfono con la promesa de un café para buscar sinergias. Nos hemos reencontrado con amigos queridos, hemos conocido gente nueva, y hemos sido testigos de una charla íntima con Silvia Torres Carbonell, que nos deja plenos, inspirados, felices.
Esto es Startup Grind Buenos Aires. Hasta el próximo encuentro.
Rocío Marcalain
PD: Apa, ¿qué pasó? No es Noe la que firma esta nota de #EPP. Es Rocío. (Aunque ahora cambiamos la voz, y si, es Noe quien les habla). Cuando #EPP nació, una de las principales ideas era crear una comunidad donde quien quiera pudiera tener un espacio de expresión. Años después conocí a Ro gracias a las reuniones mensuales de Startup Grind Buenos Aires, y me encontré con una emprendedora de la sinergia, de los encuentros y la comunicación. Nos presenta personas increíbles y no para de generar energía positiva. Hoy se puso el "traje de Noe" y escribió una crónica que vuelve a abrir la puerta a esa #ComunidadEPP con la que tanto habíamos soñado. Gracias por eso.
PD2: Pueden leer sobre los anteriores encuentros Startup Grind Buenos Aires en ESTA nota y ACÁ también.Si andás con ganas de emprender, dejame que te recomiende estas charlas. Que te abren la cabeza y te enseñan un mundo nuevo. Donde conocés gente que te inspira, y que no duda en darte una mano para que cumplas tus objetivos. En nuestras redes y las redes del encuentro (que te dejamos abajo) podés enterarte de las próximas novedades ¿Te sumás junto a nosotras? ¡Nos vemos en la próxima reunión!
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