¡Al diseño en su día!


Si, no te vamos a mentir. No pudimos ir a la primera edición del Designer Day y nos quedamos con las re ganas. Y supimos ni bien vimos que se iba a hacer una edición navideña, que esta vez no íbamos a faltar. La cita fue este finde en medio del centro platense, donde el Estudio Oquio (ubicado en 49, entre 9 y 10) recibió a los diseñadores y a toda la gente interesada en asistir para comprar, aprender y vivir un día a puro diseño.

Todo estaba en su lugar y, obviamente, no podía faltar la estética y el diseño en este gran día. La casa acompañó con su estilo vintage, donde desde las baldosas hasta las luces colgadas de los árboles crearon un ambiente armonioso y perfecto. ¿Nuestro detalle favorito? Escuchar la madera abajo de nuestros pies, y el ambiente de estar en casa que se vivía. 


Mientras los chicos de Winchester vendían cerveza tirada (el lugar elegido de los hombres que habían en el Designer Day), las sillas se iban acomodando en el patio para el inicio de las primeras charlas. Fueron Lulifa Makeup y el estilista Matías Isaac los que se encargaron de romper el hielo dando charlas sobre tendencias en peinados y make up del verano 2016, la primera de muchas clases que contaron con la presencia de Gloria Blanco (asesora de imagen), Florencia Nieto (blogger), Agustina Fae ( arquitecta) y Laureano Driusse (chef). 

Porque si hay algo que tuvo esta fiesta fue la variedad de opciones que brindaba, y que nadie quiso quedarse afuera. La expo de fotografía estuvo a cargo de Aldi Amoreo, Flor Nieves, Pilar Iberlucía y Lara Maxwell, quien nos dejaron con la boca abierta mirando sus fotos que nos hicieron recorrer el mundo entero. Obviamente, el costado de feria que caracteriza a los eventos platenses tenía que estar y hubo exponentes varios y si, ¡nos quisimos comprar todo! Porque era imposible no mirar (y querer llevarse) toda la ropa, elementos de cocina, bijou, ¡hasta lentes había! 


El Designer Day tuvo su segunda edición este pasado fin de semana y nos dejó con ganas de más. Queremos más charlas, más ropa y más expo. Porque esta fiesta (fue más que una feria) no era solo comprar. Fue compartir y aprender, escuchar a profesionales apasionados y apasionarte con ellos por lo que hacen. Fue vivir tres días a puro diseño e inspiración. Y ojalá (aunque estamos en condiciones de afirmarlo) que el 2016 nos vuelva a encontrar. Esperamos ansiosas ese día.

Nota: Noe Torres
Material Audiovisual: Flor Gago. 

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