Vamos, admitámoslo: es cruel. ¿Quién fue el GENIO que hizo que la gente, a los 17 años, tuviera que elegir que quería ser? Digo… Yo ahora me doy cuenta, pero hubiera sido tantas cosas…

No voy a ser tan pesimista de decir que no voy a poder hacerlas, pero vamos… ¿Una sola cosa? ¿Una sola carrera? ¿Podes ser periodista, y una super diseñadora? ¿O chef y…. profesor de matemáticas? ¿Médico y fotógrafo? Si, podes. Pero, no… Ellos te tienen que dar a elegir. O esto, o lo otro. Uno primero, otro después… El que mucho abarca, poco aprieta. Primero conseguís ese título. Después, si tenés tiempo, ganas, plata vas a por ese sueño que dejaste en el camino.

Siempre me gustó escribir, desde chiquita. Me gustaba leer, también. Era esa chica pesada que leía todos los carteles del centro. Entonces, que tenía que ser? Periodista? Escritora? Profesora de literatura? . Para, que siempre me gustó diseñar. Dibujar todo el día, con muchos lápices de colores al frente mío. Y, of course, pasar ese rato escuchando música. Esa que te libera. O que te hace reir. O bailar. O, simplemente, ser feliz.

Entonces, mi profesora de música me dijo que tenía oído. Y que era una idiota sino aprovechaba eso. Y lo desaproveche (si, idiota). Eso, mis dibujos, mi música, mi fotografía, mis ganas de cocinar pasteles, y también mis ganas de ser periodista.

Pero no desaparecieron ni los colores, o las canciones, o esas frases que me hacen pensar que tal vez existe esa remota posibilidad de que pueda ser todo. De hacerme ese tiempito. De ser yo, solo yo.

Muchas personas elijen sus carreras por afinidad de un año, dos o diez. Otras tantas lo hacen por la  plata que les va a dar. Por alguien mas, o porque creen que va a ser fácil.  No seas tan IMBECIL de dejar de ser vos misma por una simple decisión que tomaste en tu vida. Una de muchas decisiones. Porque un título te va a hacer licenciada, o doctora, o técnica. Pero no es lo único que va a definirte. Elegí quien querés ser, y hacete realidad.